Más pequeña que la anterior (Choza de Vega), tiene una altura de un 1, 80 m con la puerta orientada al sur.

En la parte oeste las piedras que la refuerzan con tierra se encuentran muy deterioradas, pero en su interior, los distintos niveles de círculos de piedras que cierra la cúpula no han sufrido movimiento.

Se podría decir que su estado de conservación en el interior es bueno.

Está construida a doscientos metros del Cortijo de Perpiñán, semioculta por una encina, en una ladera cercana de monte, próxima a un barranco.

Sería interesante restaurar la zona afectada, que evitaría un mayor deterioro o quizás la ruina y pérdida de la misma.